Hoy os traemos un risotto de setas que es puro vicio para los amantes del arroz. Imaginaos un arroz cremoso, con sabor a setas jugosas y un toque de queso que lo hace irresistible.
Esta receta es perfecta para esos días en los que tienes tiempo para comer algo recien hecho. ¡Prepáralo, siéntate y disfruta de cada bocado!
Ingredientes
- 300 gramos de arroz redondo.
- 2 dientes de ajo.
- 200 gramos de setas, champiñones o hongos. (Por ejemplo: Portobello)
- 150 ml de vino blanco (Un chorro generoso).
- 1200 ml de caldo de pollo (como alternativa podemos usar agua y una pastilla de caldo de pollo)
- 60 gr de mantequilla
- 150 gr de queso parmesano o mozarella rallado
- Aceite de oliva
- Sal
- Pimienta

Pasos
- Picamos los ajos lo más pequeño que podamos y preparamos los champiñones en láminas.
- En una cazuela a fuego lento, echamos un chorrito de aceite de oliva y salteamos el ajo y las setas hasta cojan un poco de color.
- Salpimentamos al gusto y añadimos el arroz. Remueve unos segundos y vierte el vino blanco. Cocina 5 minutos para que se evapore el alcohol.
- Ahora empieza la magia. El truco está en añadir el caldo poco a poco a medida que se evapore el caldo de cocción y no parar de remover la mezcla. Eso hará que el arroz quede bien meloso.
- Cocinamos el arroz durante 15-18 minutos. Sinceramente, los tiempos dependerán mucho de la temperatura de cocción, así que mi consejo probarlo a partir de ese tiempo. Si nos quedamos cortos, le damos un tiempo más.
- Cuando el arroz esté hecho, retiramos del fuego y añadimos el queso y la mantequilla para que se funda con su propio calor.
- Para darle el toque maestro, emplatamos y espolvoreamos un poco de perejil. ¡A disfrutar!